Este artículo se lo dedicamos a nuestros Fundadores y a todos quienes han sido o son Voluntarios de nuestra querida Séptima y han compartido con nuestros Directores Honorarios.
Mañana nuestra querida Séptima Compañía cumple 71 años de vida. Sin duda un Aniversario distinto. 70 años acostumbrados a juntarnos la noche previa, “la vigilia del aniversario”, en donde el resto de las Compañías del Cuerpo de Bomberos de Concepción asiste al cuartel para rendir honores y entregar los saludos de aniversarios a la guardia y a los Voluntarios que participan. Por la pandemia, este año, será todo a través de plataformas virtuales, si bien podremos vernos las caras y compartir, no habrá competencia de Aniversario, no habrá entrega de la Copa Aniversario, entre otras cosas…
Sin duda alguna, una situación poco alentadora. Pero la Séptima, fiel a su lema: “Nuquam Recedemus” ha seguido adelante con las actividades, más de 5 meses manteniendo la operatividad 24/7 distribuidos en 4 turnos semanales, considerando a los honorarios cubriendo el servicio durante los fines de semana. La Oficialidad de nuestra Compañía ha hecho grandes esfuerzos por mantener la operatividad, continuar con la capacitación y conservar nuestras actividades de todos los viernes.
Don Sergio Concha, Günter Hohf y Fernando Cleveland. Fuente: Archivo Histórico de la Séptima Compañía de Bomberos de Concepción.
Manejar una Compañía de Bomberos no es fácil. Hay un sinfín de temas, responsabilidades, preocupaciones, riesgos y sacrificios para llevar adelante este gran buque. Grandes personas han pasado por nuestra Compañía asumiendo estas responsabilidades y sacrificios con el objetivo de dar lo mejor y aportar lo más posible. Hasta el día de hoy hay registros de más de 300 voluntarios y 400 cadetes que han sido parte de nuestras filas, muchos de ellos siendo Oficiales de Compañía u Oficiales Generales. Todo esto nos lleva a que, mañana, por muy mala que sea la situación, siga siendo un motivo para honrar a nuestros fundadores, quienes dedicaron tiempo, energía y hasta dinero para darle vida a nuestra Compañía, la Séptima Compañía de Bomberos de Concepción.
Dentro de todos los Voluntarios que han pasado por la Compañía hay algunos que se destacan por sus aportes, constancia y participación, llegando algunos los cargos más altos del Cuerpo de Bombero: Superintendente o Comandante, y a los cargos más altos de la Compañía: Director o Capitán. A ellos, los Voluntarios los reconocen y distinguen de manera especial. Pero sólo a un par se les ha investido con el cargo honorífico más alto existente dentro de nuestra Compañía: Director Honorario.
Tal como lo señala el Art. 8 del reglamento del Cuerpo de Bomberos de Concepción se plantea lo siguiente:
“(…) Las Compañías podrán elegir y/o ratificar anualmente, en Asamblea General, un Director Honorario. Su título será una distinción honorífica.”
En nuestra Compañía este cargo honorífico tiene una relevancia tal, que se confiere de carácter vitalicio, por lo que no aplica esta ratificación que contempla el reglamento del Cuerpo de Bomberos. Desde nuestro último Director Honorario, Don Fernando Cleveland Recart, quien pereció el 14 de diciembre de 2017 que este cargo se encontraba vacante. Por esto el 21 de agosto de este año la Oficialidad propuso y se decidió, posteriormente ratificado por la Asamblea General, nombrar con este cargo honorífico al Honorario Agilof Reisenegger Ewerbeck, siendo así electo el 4° Director Honorario en 70 años de existencia de esta Compañía.
Este artículo será un viaje para conocer un poco más de quiénes han ostentado este cargo: Pablo Saip Müller, Gunter Hohf Jacobs, Fernando Cleveland Recart y Agilof Reisenegger Ewerbeck
“Pablito” o “Don Pablito” como muchos lo conocían fue Fundador, primer Director de la Compañía, un artífice y gran gestor dentro de los primeros 20 años de la Compañía.
Al momento de fundar la Compañía era bastante mayor que el resto, teniendo aprox. 30 años lo que hizo que tuviera gran influencia sobre el grupo de fundadores, donde la mayoría rondaba entre los 18 y 20 años. Rápidamente el grupo notó su liderazgo innato, además de su reconocimiento, tanto en la Séptima como en el Cuerpo de Bomberos y en la colectividad alemana residente en Concepción, que era indiscutible y valorado por todos, a tal punto que muchas veces quiso renunciar al cargo de Director y no se lo permitieron.
Era un hombre sencillo y de carácter amable y cercano, por lo que sus contemporáneos lo llamaban “Pablito” y los demás nos referíamos a él como “Don Pablito”. Algo típico de él era que, al entrar al casino del cuartel, saludaba amistosamente a todos en forma general, aunque fueran personas ajenas a la Cía. Si era hora de almuerzo, saludaba con un muy alemán “Mahlzeit” (buen provecho).
Siempre fue muy activo en todas las actividades complementarias al servicio mismo, como las fiestas sociales. Aquí cabe destacar la importante participación de su señora esposa, la Sra. Paulina Wolf, también muy activa presidenta del círculo de Damas Septinas, en múltiples acciones sociales y recreativas. También era muy conocido en la comunidad alemana de Concepción, tanto el Colegio, el Deportivo, como en otras instituciones.
Pablito ostentó el cargo de Director durante 10 años, entre 1949 y 1954, siendo nuestro primer Director, entre los años 1955 a 1958 y 1960 a 1961. Bajo su dirección logró gestionar la ubicación actual de nuestro Cuartel y fue gran gestor de los recursos dentro de los primeros años de vida de la Compañía. Se dice que en varias ocasiones financió cosas para la Compañía de su propio bolsillo y después nunca solicitó el reembolso de dichos fondos.
Debido a su gran liderazgo, dotes de administrar y gestionar fue electo como Superintendente del Cuerpo de Bomberos de Concepción en 1959 y a fines de su período fue cuando la Asamblea General tuvo la primera incursión en darle el cargo de Director Honorario, pero dicha moción no perduró mucho, ya que en esa misma Asamblea General sería elegido como Director de la Compañía nuevamente, cargo el cual mantendría hasta el 21 de abril de 1961 cuando definitiva e irrevocablemente renunció al cargo, momento en el cual se le inviste como nuestro primer Director Honorario.
Participó activamente en los trabajos posteriores al Terremoto en Concepción el 21 de mayo de 1960 por lo que recibió la medalla Terremoto ’60 de la Ilustre Municipalidad de Concepción.
En 1964 sería electo como Vice-Superintendente del Cuerpo de Bomberos de Concepción. El año 67 sería responsable de conversaciones con el Cónsul Honorario de la República Federal Alemana, Sr. Thomas Ramelow para analizar la opción de traer a un instructor alemán para capacitar a la Compañía. Sería la primera gestión de la Compañía para tener asesoría técnica de Alemania, liderada por Don Pablito. Gestión que realizó el Cónsul en septiembre de este mismo año, pero no se pudo concretar de forma directa.
En 1971 se le derivó la responsabilidad de desarrollar la idea de formar un Centro de Cooperación, con el fin de manejar los activos de la Compañía. En 1972 gestionó de forma gratuita una Retroexcavadora con Jorge Cubillos para emparejar y rellenar parte del terreno de nuestro cuartel. En 1973 y 1974, debido al contexto socio-político del país se le solicitó a los Honorarios y voluntarios casados que apoyaran en la Guardia Nocturna. Solicitud que Pablito atendió, pernoctando reiteradas veces, junto con otros fundadores y honorarios, para quedar operativos en nuestra Compañía. Ese mismo año, recibe el premio de 25 años de servicio y pasa a ser Honorario del Honorable Directorio General.
En 1980, específicamente 9 y 10 de octubre, se realiza en Concepción la reunión anual de la Liga Chileno-Alemana (DCB), para la cual la Séptima facilita su cuartel para sesiones, comidas y almuerzos. En esta ocasión la Liga distingue, con la medalla Carlos Anwandter, a nuestro Director Honorario Pablo Saip Müller. Este premio es entregado anualmente a personas destacadas y distinguidas en el ámbito de las instituciones alemanas o su difusión de la cultura alemana en nuestro país.
En 1989 don Pablito recibe el premio de 40 años de servicio de Cuerpo y de Compañía, pero ya no lo hace presencialmente. Recibe el premio en su domicilio, su salud se encuentra quebrantada y no tiene posibilidades de salir. Poco después su familia lo trasladó a Santiago para sus cuidados paliativos.
Durante su vida bomberil apoyó a las diferentes oficialidades con una actitud muy deferente y cordial. Como Director Honorario, siempre estaba presente en los actos de servicio, ejercicios y otros, para recibir el saludo y honores de la formación. Luego de un largo y rápido deterioro de salud, Don Pablito fallece el 17 de febrero de 1993.
Sin lugar a duda, don Pablito fue un pilar fundamental en la Séptima. Todos los años, el 3 de marzo, desde 1998, se realiza el ejercicio Pablo Saip Müller en conmemoración de la toma de posesión de nuestro Cuartel, del cual él fue el gran artífice y en homenaje a toda la labor dedicada por él a la Compañía.
Al igual que Don Pablito, Günter Hohf fue Fundador de nuestra Compañía. Si bien en su vida bomberil ocupó muchos cargos operativos, era más afín a los cargos directivos. De hecho, se desempeñó muchos años como Secretario y lo mismo como Director.
Esto le daba un carácter más tranquilo y reposado, no obstante, siempre activo y participando de las Juntas de Oficiales como órgano directivo y en la actividad más social, entendiendo aquí como la convivencia de los viernes post ejercicios, típicamente los juegos de cacho al “dudo”.
Fuera de la Compañía, fue fundador de la Hora Alemana de Concepción, programa radial, que al día de hoy aún sigue transmitiendo. En las Instituciones Chileno Alemanas era socio activo en club de regatas Lo Méndez, en el club Alemán, en la corporación del Colegio Alemán de Concepción, en el club Victoria, en la Corporación Sanatorio Alemán y hasta 1962 de la iglesia luterana.
En 1951 fue elegido Capitán de la Compañía por primera vez y se mantendría en el cargo hasta 1954. En 1955 asume por primera vez como Director de la Compañía. Luego, ostenta el cargo de Secretario desde 1956 hasta marzo de 1957, donde asume como Capitán de la Compañía. Se repetiría el año 58 como Secretario de la Compañía, para pasar nuevamente a asumir como Director de Compañía el año 1959 y 1960, siendo estos relevantes para nuestra Compañía y para la historia del País: 1959 y 1960. Bajo su mandato la Compañía tomó posesión del Cuartel el 3 de marzo de 1959 y lideró su inauguración el 7 de septiembre de 1959. Además, estuvo a cargo de la Compañía para el Terremoto del año 1960. También recibiría la medalla Terremoto ’60 de la Ilustre Municipalidad de Concepción.
Pasó 3 años sin desempeñarse en cargos de la Compañía, hasta que en 1963 y 1964 sería reelecto como Director de Compañía. Luego de este período dejaría de ostentar cargos hasta 1969, donde asumiría como Secretario, luego, el año 70, como Director, y nuevamente de 1975 a 1977 como Secretario de la Compañía, repitiendo el cargo entre 1985 a 1986 y el año 96, logrando 9 años como Secretario de Compañía en Total. Los años 1978 y entre 1987 y 1989 volvería a asumir como Director última vez, sumando un total de 8 años como Director de Compañía.
Fácil es recordar su alegre participación en las “timbas” de cartas que se realizaron durante varias jornadas de acuartelamiento durante septiembre de 1973. En el salón chico de entonces, por entretención, nos juntábamos muchos a jugar “21 Real”, sin dinero por supuesto. La participación de Günter, a veces como “caja”, animaban graciosamente la jornada.
El año 1999 para Don Günter fue un año de muchas celebración. Pasa a ser Honorario del Honorable Directorio General, recibe el premio “Cincuentenario” por su dedicación y entrega ininterrumpida. Recibe la medalla “Vecino Bombero destacado” por parte de la I.Municipalidad de Concepción y la Junta Nacional de Bomberos le otorga la distinción más alta que un bombero puede obtener a lo largo de su carrera bomberil: “Bombero Insigne de Chile“. Además, recibe la Medalla al mérito del Deutscher Feuerwehrverband (Federación de Bomberos de la República Federal de Alemania), entregada por el Vicepresidente del mismo Sr. Rolf Dieter Bräunig. En la ceremonia del Cincuentenario de la Compañía, luego de varios años de trabajo, hace entrega a la Compañía del libro escrito por él y recopilación histórica, “Crónicas de 50 años” al Director de la Compañía, Javier Troncoso F. En este libro recopila y narra desde su perspectiva gran parte de la historia de nuestra Compañía desde la idea de la fundación, libro que al día de hoy nos permite revivir el pasar del tiempo de nuestra Compañía, sin que los hechos históricos se pierdan por falta de registro. Además de permitirnos recopilar hitos y datos relevantes de emergencias, actividades y demases.
Pasaba el tiempo desde que Don Pablito ya no estaba con nosotros (1993) y aún no se elegía un nuevo Director Honorario. El principal motivo de esta ventana de tiempo sin Director Honorario fue el hecho que después de la partida de Don Pablito, quedaban 3 fundadores de la Compañía vivos: Günter Hohf, Knud Esrom y Pedro Spoerer.
La idea de elegir a uno como Director Honorario y dejar a otros dos con las expectativas de serlo fue lo que llevó a la Compañía a no elegir a alguno en desmedro de los otros dos. En 2003 sufre nuestra Compañía una gran pérdida, la partida de Don Pedro Spoerer.
El año 2004 recibe don Günter el premio por 55 años de servicio de Cuerpo y de Compañía, siendo hasta ese momento el premio de más años de servicio recibidos por un septino a la fecha. En 2008, ya fallecido Knud Esrom y luego de 15 años sin Director Honorario, y quedando Günter como el único fundador que a la fecha seguía en nuestras filas, el 7 de septiembre es investido como Director Honorario de la Compañía, convirtiéndose en el segundo Director Honorario en la historia de la Compañía.
Gunther Hohf falleció, con 59 años de servicios cumplidos, el 22 de diciembre de 2008. Así nos toca despedir a nuestro último Fundador en nuestras filas.
Don Fernando, o el “Flaco”, como muchos le decían, ingresó a la Compañía el 10 de julio de 1957. Provenía de la 2da Compañía de Bomberos de Concepción, de donde se retiró con 13 años de servicio para ingresar a la 7ª. Compañía.
Don Fernando siempre fue más de la línea ejecutiva en los cargos que desempeñó. Siempre se le consideró como una persona muy técnica a nivel bomberil. De hecho, escribió mucho instructivos técnicos para instrucción de los bomberos y participaba mucho en el desarrollo técnico de la actividad bomberil.
Al año siguiente de su ingreso, 1958, asumió como Teniente, cargo que desempeñó hasta 1960. Luego de dos años, vuelve a ser electo en 1962 como Teniente hasta 1963. En 1964 sugiere la idea de un parche para el brazo para nuestro uniforme de Parada. Se plasmó en el primer parche circular usado por nuestra Compañía, que consideraba el águila alemana y la leyenda de nuestro lema “Nunquam Recedemus” sobre un fondo color oro y borde exterior rojo. Rápidamente, por su capacidad técnica y su liderazgo, ese mismo año, “Don Feña” fue elegido por primera vez como Capitán de la Compañía. Increíblemente, poco después, asumió como Comandante en 1965 y fundó el departamento técnico del Cuerpo de Bomberos de Concepción, volviendo a ser Capitán en 1966 y 1968. Desempeñó el cargo de Teniente en 1969, completando 6 años en total como Teniente de Compañía.
Nuevamente, en 1971 y entre 1975 y 1976 asumió como Capitán de Compañía. Participó como Capitán Instructor de la 10ª Cía. en Lorenzo Arenas, colaborando en su formación y consolidación. Al año siguiente, en 1977, regresa a Comandancia como Capitán Inspector.
Don Fernando siempre fue muy cercano a las nuevas generaciones, siempre estaba mezclado con los más jóvenes. Mantenía una participación muy activa. Le encantaba ayudar dando consejos y aportando con su experiencia y conocimiento.
Su ruta de cargos no terminaba aquí, el año 1987 fue Tesorero. Pasó a ser 2° Comandante durante 1988 y volvió a ostentar el cargo de Tesorero en 1989, entre 1992 al 1994, entre 1996 al 1997 y finalmente el 2003, un total de 8 años. Llegando a ser Tesorero General del Cuerpo de Bomberos el año 1998 al 2000.
El Año 2007 recibe la Medalla al mérito de la Deutscher Feuerwehrverband (Federación de Bomberos de la República Federal de Alemania), entregada en representación de ese organismo por el Consul Honorario de Alemania en Concepción.
En 2011 la Asamblea General decide investirlo como Director Honorario, quedando Don Fernando como el 3er Director Honorario en 62 años de existencia de la Compañía. En el año 2014, recibió uno de los premios más altos recibidos por un septino, el premio por 70 años de servicio en el Cuerpo de Bomberos y el 2017 recibe premio por 60 años de servicio de Compañía.
Don Fernando nos deja el 14 de diciembre de 2017, así también nuestro 3° Director Honorario.
“Don Agi” Ingresó a la Compañía el 29 de marzo de 1989, luego de una larga relación de amistad y colaboración con la Compañía en su rol de miembro de los directorios en diversas Instituciones Chileno-Alemanas del gran Concepción. Previamente ya había tenido un acercamiento a los Bomberos siendo, junto con su hermano, Tassilo Reisenegger (QEPD), fundadores de la Decimoquinta Compañía “Maximo Humbser” del cuerpo de bomberos de Santiago en 1959.
Fue electo como Director en 1992 y ocupó ese cargo durante 10 años (entre 1992 y 1997, los años 2000, 2001, 2003 y 2004) siendo además Pro Tesorero General del Cuerpo de Bomberos durante 2 años, en los cuales materializó junto a los Honorarios P. Spoerer y F. Cleveland la venta de los edificios de la 2ª y 4ª Compañía del Cuerpo de Bomberos de Concepcion así como un sitio eriazo de propiedad del Cuerpo para con ello iniciar la compra y remodelación del Cuartel General que actualmente posee el Cuerpo de Bomberos en calle Orompello.
Desde la Dirección emprendió el año 1994 con el desafío de renovar las dependencias de la Guardia Nocturna, materializando la construcción de la actual dependencia de la misma, sobre la casa del cuartelero y conectada al edificio principal. Asi mismo se creó el actual salón del bar.
Apoyó la organización del Cuerpo de Bomberos de San Pedro de la Paz, cuando las Compañías de esa comuna decidieron separarse del Cuerpo de Bombero de Concepción. Asumió como Director y Superintendente del incipiente Cuerpo de Bomberos de San Pedro de la Paz desde el 21 de noviembre de 1999 hasta el 2001, cuando San Pedro eligió sus Oficiales Generales por primera vez.
Agilof se caracteriza por ser una persona introvertida, muy entusiasta y muy colaborador respecto a los proyectos de la Compañía y en general de las Instituciones Chileno-Alemanas. Además. Muy activo de compartir y pasarlo bien con sus amigos, asiste casi todos los años a la convención de Compañías Chileno Alemanas de Bomberos, donde sea que esta se realice.
Fuera de los Bomberos es aficionado a la restauración de vehículos antiguos.
Logró en 2002, luego de una intensa búsqueda, dar con el paradero de nuestro Carro Mercedes Benz Metz TLF-16T del año 1957, el “Conejo”. Este carro, luego de haber pasado por la 9ª. Cïa de Concepción y haber sido entregado a la 1° Compañía del Cuerpo de Bomberos de San Pedro de la Paz, habiendo pasado por la 2° y 4° Compañía de ese mismo Cuerpo, fue entregado a la 3° Compañía de Coihueco, ubicada en la localidad de Cato. En 2001 fue dado de baja y dejado a la suerte, hasta que en 2002 Don Agi junto a otros oficiales de la Compañía, lo encontró y lo recuperó. A partir de ahí, nace el proyecto de restaurar esta joya sobre ruedas. La Compañía autoriza al Honorario Reisenegger a desarrollar y ejecutar este proyecto y actualmente el carro está restaurado y a su cuidado.
Así como “Don Agi”, quien siempre ha estado dispuesto a ayudar, apoya al Cuerpo de Bomberos con la manufactura de los premios entregados en la ceremonia anual, celebrada el domingo más cercano al 30 de junio, donde se celebra el Día del Bombero.
Este año, 2020, nuestro Honorario, recibe el premio por 30 años de servicio de Compañía y recibe el premio por 30 años de servicio del Cuerpo.
Es por esto que el 21 de agosto de 2020 la Asamblea General decide investirlo como Director Honorario, pasando a ser el 4° Director Honorario de nuestra Compañía en los casi 71 años de servicio a la comunidad.
Larga vida y cariñosos saludos de esta Compañía que te aprecia y estima querido Agilof.
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