Los uniformes tienen algo mágico. En los libros de cuentos los príncipes los visten para sus conquistas y batallas épicas o en los desfiles militares, desde su preparación hasta la presentación misma, uno de los aspectos más relevantes es lucir correctamente los uniformes e incluso hoy, los comics consideran uniformes, con capas y escudos, para cada héroe moderno de moda.
Es interesante descubrir que la mística de los uniformes está en su poder de comunicación que tienen hacia las demás personas pues proyectan profesiones, autoridad, jerarquía, identidad, orden, organización, aspectos que han sido estudiado abundantemente, pudiendo resumirse que los uniformes son símbolos de reconocimiento tanto para el que lo porta así como también para el que lo observa.
Formación de la Compañía con Uniforme de Gala. Fuente: W. Hohf
Desde que se formó el primer Cuerpo de Bomberos de Valparaíso (y de Chile) con 4 Compañías en 1851, han sido voluntarios las personas que las han constituido, organizados jerárquicamente, similar a cualquier rama de las Fuerzas Armadas, por lo que resultó natural la adopción y uso de uniformes tanto para el trabajo en los incendios, socorros o emergencias, así como también para las presentaciones oficiales a las que son invitados a participar en las ciudades, vestidos con sus Uniformes de Parada y de Gala, y que el público espera ver y recibirlos con aplausos a modo de retribución y reconocimiento, a su paso marcial.
Atendiendo a que muchas Compañías fueron fundadas en base a las colonias residentes por ejemplo, la Primera Compañía de Bombas de Chile que nació en Valparaíso el 6 de junio de 1851, con la inscripción de 151 hombres, británicos y norteamericanos. En nuestro Concepción, las colonias hicieron lo propio, así es como la Séptima Compañía de Bomberos de Concepción nació dentro de la juventud chileno-alemana de Concepción, y por tanto, el 7 septiembre de 1949, su Acta de Fundación fue firmada por 54 descendientes alemanes.
Dado lo anterior, ya en la primera Reunión de Oficiales del 26 de septiembre de 1949, se abordó el punto de los uniformes: el Uniforme de Parada y el de Trabajo de la naciente Compañía, conocidos dentro de la jerga bomberil de entonces como Uniforme N°1 y N°2, respectivamente. Siguiendo el relato del Director Honorario Günther Hohf en su libro Crónicas de 50 años, el flamante Director, Pablo Saip, indica que comprará una partida de botones de bronce, grandes y chicos, con el N°7 y que gestionará, a su vez, la compra del género en la Fábrica de Paños Bellavista Oveja Tomé, para las casacas de parada.
Se destaca el hecho que ya la primera reunión tenga especial mención el Uniforme de Parada, tal vez porque desde siempre se considera como la carta de presentación de la Compañía en los actos solemnes, por lo que resulta importante brindar especial preocupación a los detalles, prueba de ello, es la decisión de nuestro primer Director de procurarse de botones de bronce con el 7.
Para los años 50 e incluso hoy, los botones de bronces no eran fáciles de conseguir y, sin equivocarse, eran un lujo; había que comprarlos y encargarlos a Santiago, de acuerdo a lo indicado por el Honorario Rodrigo Lira, no eran nacionales sino que los botones de bronce con los N°7 eran importados de Francia.
En efecto, lo anterior puede demostrarse al verificar el fondo de los botones originales que aún existen y que debiesen valorarse, per se, como tesoro. En ellos, puede leerse la marca de la Casa Trelon Weldon & Weil, acuñados con las iniciales “T. W. & W” y la leyenda de “PARIS”, por ser una Casa francesa que funcionó en París desde 1845 hasta su cierre el año 2007.
Botón de bronce con N° 7 y Estrella. . Fuente: W. Hohf / R.Lira.
Reverso del botón de bronce con N° 7 y Estrella. Fuente: W. Hohf / R.Lira.
Encontrar botones de bronce no era fácil; recuerda el Honorario Werner Hohf que en una ocasión y ante la necesidad de contar con ellos, se llegó a la Cooperativa de Carabineros de Concepción donde trabajaba el Honorario Parra de la 5ta Compañía y, casualmente, había un stock de botones de bronce con el número 7 y numerales para los cuellos así que, una vez adquiridos todos, supusieron que alguna Comisaría se quedó sin reposición de botones, ya que el Honorario Parra durante muchos años hizo los pedidos extraordinarios y, como señala el Honorario Rojas, porque en esa época no existía en Concepción una 7ma Comisaría. Por lo mismo, hacia los años 80- 85 y por ingenio del Honorario George Cleveland se probó el cromado de botones y fornituras, léase hebillas, números 7 de cuello, palas, etc, proceso que finalizó, aproximadamente el año 1988, indica Hohf.
Actualmente, los botones ya no tienen el 7 y una estrella como otrora, sino que se importan de Alemania por lo que portan un águila alemana, son de color plateado y son los mismos que usa la Feuerwehr alemana.
Botón actual. Fuente: C. Briceño
El definir nuestro Uniforme N°1 no se relaciona con altanería sino que, desde la fundación de la Compañía, fue una condición a cumplir impuesta por el Honorable Directorio General para que la naciente Compañía fuera aceptada en el Cuerpo de Bomberos de Concepción, con un plazo perentorio, tal como quedó refrendado en el punto N° 4 del Oficio N°85 del 1° octubre de 1949 que dice, literalmente “Los uniformes deberán ser adquiridos en el plazo de sesenta días”; por lo que no hubo espacio para dilatar la obtención de los uniformes.
El 5 de enero 1950, en la segunda Reunión General de la Compañía se acuerda que cada uno cancelará el valor de la confección de la casaca de paño, en tanto que el paño lo aportará la Compañía. Durante esa sesión y por sugerencia del Capitán Udo Hauser, propone que el corte del futuro Uniforme de Parada estuviera inspirado en el modelo prusiano, de color azul Prusia, corte de la casaca que se ha procurado, sabiamente, mantener hasta hoy.
Tal como recuerda el Honorario Rodrigo Monsalve, una controversia histórica que despierta cada cierto tiempo durante las actividades de convivencia y camaradería es respecto a las 2 corridas de 4 botones de la casaca del Uniforme de Parada, ya que algunos sostienen que los uniformes prusianos usaban una sola corrida central de botones y, otros, refutan que, de acuerdo a lo que señalaba Pablito Saip, la doble hilera de botones obedece a su inspiración en el uniforme de los Cadetes de la Escuela de Aviación prusiana que estaba en Brandenburg, recordando, Pablito, su participación en la Wehrmacht mientras estuvo en Alemania, a fines de los años 30, y así quedará determinado el motivo, razón y tradición de nuestra doble abotonadura de 4 botones.
Primer Aniversario de Séptima Compañía de Bomberos en Uniforme N°1. Fuente: Archivo Histórico 7° Cía Bomberos de Concepción.
Aun cuando la fotografía histórica del 1° Aniversario de nuestra Compañía es en blanco y negro, hay detalles que merecen destacarse como es el contraste del cuello sobre el azul prusiano de la casaca. El cuello desde su origen ha sido recto de paño rojo intenso, sin solapa, con sendos 7 de bronce en las puntas; el borde del corte de la casaca cruzada sobre el pecho tiene borde rojo, al igual que el borde de las botamangas en los antebrazos y, tal como puede apreciarse en la imagen, resplandecen los bronces de los botones, de la hebilla del cinturón que era una placa con un 7, y de las charreteras sobre los hombros.
Charreteras hombros de bronce. Fuente: Archivo Histórico 7° Cía Bomberos de Concepción
Indica el Honorario Werner Hohf que las charreteras eran articuladas y caras tanto para adquirirlas como de mantenerlas; a pesar a que pudiesen parecer un adorno, las charreteras articuladas de bronce de los bomberos cumplían la función de proteger las casacas de trabajo de los voluntarios en las tareas de desaguar las tiras utilizadas en los incendios, por lo que su uso en los Uniformes de Parada de nuestra Compañía era el símbolo para indicar que la Compañía era de agua, tal como lo determinó el Oficio 085 del 1° octubre de 1949. No obstante, aclara Hohf, todas las Compañías del Cuerpo de Bomberos de Concepción las usaban sin distinción de especialidad.
Justamente por el elevado costo, dificultad para mantenerlas, limpiarlas y casi imposible repararlas, cuando el Directorio General decidió su reemplazo por palas estilo militar por medio del Oficio N°15 de 1969, fueron eliminadas del Uniforme de Parada. El uso de palas, también llamadas hombreras o galoneras, se acostumbra usar cuando el uniforme no lleva rango en las mangas o botamangas, de manera que las palas permiten distinguir los rangos jerárquicos, como complemento a emblemas de los cascos y gorras.
Nuestra Compañía optó por esta alternativa, y pasó primeramente a palas planas de género con botón y número 7 para los Voluntarios activos; se incorporan cintas doradas y blancas para los Honorario y, con borde exterior de hilo dorado con cinta de seda blanca para el Director Honorario de Compañía.
Palas planas de género de Voluntario Honorario. Fuente: W. Hohf
Palas planas de género de Voluntario, Honorario y Director Honorario de Compañía. Fuente: Hon. W. Hohf
Actualmente, las palas son modelo Brandenburg importadas de Alemania y son similares a las que usa la Feuerwehr alemana. Lo anterior, detalla el Honorario Rojas, no es casual, sino que tiene un sentido simbólico pues nuestra Compañía lleva el nombre del colono alemán Bernhard E. Philippi quien nació en Charlottenburg, Berlín, ubicado dentro del actual Estado Federal de Brandenburg y que, por otra parte no menor, este Estado Federal tiene como escudo de armas al Águila del sacro Imperio Romano Germánico, de donde deriva el emblema actual de Alemania y símbolo institucional de nuestra Compañía.
Nuestros primeros cascos fueron modelo americano, de color negro con cucarda negra en forma de gota con número 7 de bronce para los Voluntarios, en tanto que la oficialidad se distinguía por cucarda blanca en forma de gota con grado y número; el 23 de mayo 1950 se informó que Comandancia entregará los correspondientes cascos, sin costo a los voluntarios, completando el uniforme de la Compañía. Günther Hohf destaca que los cascos entregados correspondían a una partida adquirida por el Cuerpo de Bomberos de Concepción, con lo cual se lograba uniformar con casco americano a todas las Compañías de la ciudad, terminando con la diversidad de cascos en uso.
1° Aniversario Séptima Compañía de Bomberos de Concepción. Fuente: Archivo Histórico 7° Cía Bomberos de Concepción
La historia del casco de la Compañía tiene su propio y entretenido recorrido, ya que hoy día, nuestro casco para el Uniforme de Parada es un Stahlhelm, cuyo uso implicó varios años de perseverancia hasta obtener su autorización de uso oficial y formal.
Finalmente, el Uniforme de Parada incluía un cinturón negro de charol al inicio y luego, en los 70, de cuero sintético o tevinil, guantes blancos, pantalón blanco y zapatos negros.
Cinturón con hebilla bronce con N°7. Fuente: W. Hohf
Los que alguna vez han tenido que limpiar bronces saben que no es fácil y demanda paciencia y trabajo hasta lograr ese brillo y lustre que permite reflejarse en él, por lo que sin duda, el lucir los bronces encandilantes del Uniforme de Parada al sol debe haber sido una gran satisfacción. Así, al menos lo relata en su libro de Crónicas de 50 Años, donde Günther Hohf recuerda que los primeros años de formación de la Compañía no fueron fáciles, cada logro era el resultado de mucho esfuerzo, perseverancia y sacrificios, por lo que es comprensible el orgullo en el relato de 1959 cuando el 21 de mayo, la Compañía se presenta con su Uniforme N°1, de Parada, y Uniforme N°3, de Ejercicio, para la fundación de la 1° Compañía de Bomberos de Yumbel.
El año 1961, siguiendo los recuerdos de Günther Hohf, el Director comunica que se están confeccionando las casacas de paño y recomienda una mayor asistencia a las pruebas del sastre. Cada hechura de la casaca tiene un costo de E° 12.-. Era un sastre de los militares por lo que acostumbraba a confeccionar las casacas de los soldados y parecía que estaba haciendo una de éstas, por lo que más que sastre para las casacas prusianas, resultó un “de-sastre”.
Para el año 1964, de acuerdo al libro Crónicas de 50 Años, para el 15° Aniversario, se oficializaron a los primeros Honorarios de la Compañía: Pablo Saip, Günther Hohf, Knud Esrom, Bernardo Griebe y Pedro Spoerer, y para conmemorar el aniversario, se propone agregar en los parches de los cuellos del Uniforme de Parada un laurel dorado en el 7, decisión que quedó para más adelante que se mantiene como un registro anecdótico, hasta el día de hoy.
A diferencia del laurel en el 7, ese mismo año, según los recuerdos de Hohf, más preciso, el 16 de junio, se recibió una muestra del distintivo de la 15° Compañía de Bomberos de Santiago que tienen por escudo al Águila Imperial alemana, de color negro, con un 15 de color blanco y la leyenda “Gott mit uns”, surgiendo la idea de un parche para el brazo que, bajo la creatividad y arte el Honorario Fernando Cleveland, se plasmó en el primer parche circular usado por nuestra Compañía, que considera el águila alemana y la leyenda de nuestro lema “Nuncuam Recedemus” sobre un fondo oro y borde exterior rojo.
Siguiendo el relato del Honorario Werner Hohf, este parche se mantuvo hasta la constitución de la Confederación de Compañías de Bomberos Chileno- Alemanas, el año 1974, organización que propone crear un distintivo único para todas las Compañías alemanas de Chile, y a partir de fines del 1979, es el parche que lucen en el brazo todos los Voluntarios y Honorarios de nuestra Compañía, actualmente, con la autorización formal de Directorio General obtenida por el Director Rodrigo Monsalve para usar dicho distintivo del águila negra, de patas y pico rojo bordado, sobre un fondo amarillo-oro a coserse en la manga del brazo izquierdo de la casaca del Uniforme de Parada y que, según recuerda en Honorario Günther Hohf en su libro, en broma, llamaron “el choroy” alemán, dicho sea de paso, es justo hacer notar la coincidencia y similitud entre el diseño septino del Honorario Cleveland y el actual, más estilizado.
Primer parche diseñado por el Honorario Fernando Cleveland R. Fuente: C. Briceño / A. Schirmer
Parche actual del águila imperial. Va en el brazo izquierdo del uniforme de Gala y Parada. Fuente: C. Briceño / A. Schirmer
En abril de 1968, la Comandancia impone el uso en la casaca de paño del Uniforme de Parada de una insignia con el nombre de la ciudad, en nuestro caso, con la palabra “Concepción” en la manga bajo la costura del hombro izquierdo, distintivo implementado a nivel territorial con el nombre del Cuerpo de Bomberos correspondiente a la Compañía, lo que permitía distinguirse entre las Compañías y Cuerpos de Bomberos y que lucían los Honorarios y Voluntario hasta los años 80, cuando comenzó a entrar en desuso.
Parche “Concepción” y el parche del Águila característico de las Compañías Alemanas. Fuente: Archivo Histórico 7° Cía Bomberos Concepción
Si bien desde 1950 se acordó que la Compañía aportaba el paño para la casaca del Uniforme de Parada, conseguirlo, resultó ser harina de otro costal para la Compañía y cada año costaba más encontrar el tipo de paño, la calidad y el color azul prusiano tan distintivo. Consecuentemente, para 1976 coexistían 2 tonos de azul prusiano en los uniformes, persistía la dificultad de proveedor, por lo que se plantea la alternativa de cambiar el color a azul oscuro del paño para las casacas del Uniforme de Parada que se compraron un par de rollos en la fábrica Bellavista Oveja Tomé y cada voluntario llevaba la tela a la sastrería Fissore para la confección, según recuerda el Honorario Rodrigo Monsalve. Por lo anterior, muchas fotografías de la época muestran a la Compañía con Uniformes de Parada de distintos tonos de azules, desde azul prusiano a azul oscuro.
Uniforme de Parada en distintos tonos en 1978. Fuente: Archivo Histórico 7° Cía Bomberos Concepción
Para los preparativos de la celebración del 50° Aniversario de la Compañía, el año 1999, recuerda el entonces Director Rodrigo Monsalve que se decidió uniformar en un mismo tono el color del paño de las casacas y se decidió, como mejor alternativa, el azul oscuro y paño grueso, similar a la Escuela Militar y es el color y paño que se mantiene.
Aún cuando el Honorable Directorio General había creado un nuevo Uniforme de Gala para su uso en ocasiones solemnes por el año 1967, sólo para los años 1974 se instruye su uso para la Oficialidad de las Compañías y, poco a poco, el Uniforme de Gala fue incorporándose a la vestimenta institucional para todos los Honorarios y Voluntarios y que consistía en vestir la casaca de parada de la Compañía, sin cinturón, con pantalones negros de corte recto sin bastilla con vivo color amarillo oro, hoy Uniforme N°1 de nuestra Compañía.
Actualmente, dado el valor simbólico que representan los uniformes para las Compañías, éstos se encuentran normados bajo un Reglamento que, en su Art 179 señala que el Cuerpo de Bomberos tendrá 5 tipos de uniformes: el N°1 será el de Gala; el N°2, de Parada; el N°3, de Presentación; el N°4 de Trabajo y el N°5, el de Cuartel que es el de uso para trabajos internos dentro de la Compañía.
El año 2013, señala el Honorario Sergio Rojas, se logra el anhelado proyecto de cambiar y mejorar nuestro Uniforme de Gala, dejando atrás el pesado paño por una tela más cómoda de vestir y estilizada, el actual casimir que es una tela de lana de ovejas, resistente a las arrugas y de alta durabilidad, especialmente confeccionado para nuestra Compañía, con código de fabricación propio, por la fábrica textil Crossville Fabric Chile SA, ubicada en Tomé. Una característica distintiva del Uniforme de Gala es que reemplaza el Stahlhelm por una gorra de color azul oscuro, de plato inclinado, con ribetes rojo, emblema y piocha de la Feuerwehr alemana; la visera es de charol negra y el barboquejo es negro para los Voluntarios, de doble cordón trenzado plateado para los Oficiales Operativos, dorado para los Oficiales Administrativos y trenzado plateado con rojo, para los Honorarios de la Compañía.
Formación de la Compañía frente al cuartel para el septuagésimo Aniversario (2019). A la izquierda se puede apreciar a los Honorarios, al medio a los Voluntarios y a la Derecha la Brigada Juvenil, todos con su respectivo uniforme de Gala. Fuente: Archivo Histórico 7° Cía. de Bomberos de Concepción.
Precisa el Honorario Rojas que la confección del Uniforme de Gala sería adjudicada a la sastrería Militar e incluiría los juegos de pantalones de los Uniformes de Parada y de Gala, y, por primera vez, se considera el uso de un juego exclusivo de colleras de uso exclusivo para Oficiales y Honorarios, importados de Alemania, para las camisas blancas.
Gorra de Voluntario. Fuente: C. Briceño
Gorra Honorario del actual uniforme de Gala. Fuente: W. Hohf
Colleras Uniforme de Gala Oficiales y Honorarios. Fuente: W. Hohf
Colleras Uniforme de Gala Oficiales y Honorarios. Fuente: W. Hohf
Después de repasar la evolución del Uniforme de Parada y de Gala es interesante insistir que los uniformes simbolizan la unidad de todos y cada uno de los integrantes de la Compañía, por sobre la individualidad, pues no sólo se comparte la misión bomberil sino que, al mismo tiempo, nuestras Oficialidades han sabido mantener la identidad particular a través del origen histórico del modelo de corte, del color, emblemas y distintivos, cuan más prestigioso y vistoso, especialmente el Uniforme de Gala, aspecto que la Compañía ha sabido preservar, independiente de modas transitorias, en honor a nuestros Fundadores.
Sin duda, nuestro Uniforme nos da el sentido de identidad, de pertenencia y, el Voluntario que tiene el honor de vestirlo, al lucirlo con respeto y prestancia, se liga, inexorablemente, a la historia pasada, presente y futura de la Séptima de Concepción.
Fuente:
